Fotografía de Esther Pérez de Herrera |
Los tembleques de colores, tradicionalmente utilizados con la Pollera Montuna, han evolucionado en su confección y rápidamente se han integrado con los tan anhelados cristales tornasolados tipo swarosky.
No se puede negar que esto ha hecho que la confección de los tembleques de colores sea más delicada y con hermosos detalles, hechos para destacar el brillos de los cristales que junto a los colores brillantes se suman a esta rica evolución.
Las artesanas trabajan con esmeros en la belleza y delicada confección, que junto al costo de los materiales, también ha elevado el precio de las cabezas de tembleques, los números de las perlas se han reducido, poco se utilizan los números 5-6 u 8 y las lagrimas, barrilitos o granos de arroz también se utilizan en números pequeños. Esto también compensa el peso de los tembleques ya que los cristales también pesan.
Fotografía de Esther Pérez de Herrera |
Detalles de los estambres de una flor, con cristales, perlas y chaquiras, observe el tamaño de las chaquiras son más pequeñas de las que se encuentran en el mercado, ya que también son swarosky.
Confección de tembleques de Marina de Zarak
Fotografía de Esther Pérez de Herrera
Fotografía de Esther Pérez de Herrera |
Flor terminada de armar, falta la base, con sus hojas y estambres.
Confección de tembleques de Marina de Zarak
Fotografía de Esther Pérez de Herrera |
Tembleque de flores, hojas y estambres, este es el que se usa en el lugar de las pencas, aun lado de los peinetones, en rosados intensos, cristales y perlas.
Confección de tembleques de Marina de Zarak
Aunque no hay cantidad de colores límite para la cabeza de tembleques, estos deben ser armónicos, y que al momento de armar la cabeza, se ubiquen en contrastes, si hay colores repetidos, estos no se deben colocar uno a lado del otro, por lo tanto se debe considerar el modelo del tembleque para la posición que ocupan en la cabeza y su color al momento de armar los tembleques.
En el caso de las Montunas, se debe considerar los colores de la Montuna, para los tembleques, por ejemplo si sus colores son en tonos pálidos, unos tembleques en colores fuertes, no seria armónico. De la misma forma el color de los tembleques se debe considerar en el enjaretado en una pollera blanca por ejemplo.